En las sesiones de parque abordamos esas dificúltades desde la actividad más preciada para los pequeños como es el juego.
Desde este lenguaje lúdico abordamos el mundo emocional del niñ@, la presencia de los padres con los pequeños y pequeñas aceptando las emociones que surjan tanto en niños como adultos, aprendiendo a observar y autoobservarse para desarrollar las estrategias más apropiadas tanto en la buena comunicación con otros como consigo mismo, sobre todo restablecer el placer del niño de sentirse mirado y apreciado, reconstituyendo el vínculo afectivo y su autoestima.